Entonces despertó esa mañana
y toda su vida había cambiado,
ya no era la misma; ni ella ni sus pensamientos.
No fue magia ni suerte...fue destino,
y así comenzó a creer.
Creer después de tantos años
en esa teoría que siempre creyó absurda
de que la vida a todos nos cambia porque en alguna parte,
algo o alguien escribió que así debía ser.
pero después de todo
¿quien era ella para quitarle credibilidad a ese "escritor"?,
solo deseó que ojalá este tenga buena ortografía.
Así que se puso su chaqueta y zapatos deportivos,
y al mirarse al espejo
decidió que su cabello así estaba bien para hoy,
salio por la puerta tal y como quien sabe con seguridad a donde va;
y por primera vez, así se sentía...
y a pesar de llevar tantos años en este mundo,
fue ese día cuando nació,
comenzó a respirar,
a escuchar, a ver, a sentir,
fue ese día,
cuando comenzó a vivir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario